polvos de sol

1
Jul

Cómo aplicar los polvos de sol

Cuando en verano nos tocan los primeros rayos de sol nuestro rostro adquiere ese “tono buena cara” que no tenemos en otra época del año y para recrear ese favorecedor efecto nacieron los polvos de sol o polvos bronceadores, esos polvos marrones con partículas doradas o nacaradas que proporcionan luz a tu rostro.

El problema que podemos encontrar en este producto es, como en todo lo que tiene que ver con el universo de la belleza, que abusar de él puede ser un error. Por lo tanto, te recomendamos utilizar un tono similar al de tu color de piel, no son autobronceadores, con ellos no vamos a intentar pasar de una tez blanca completamente a un bronceador como si hubiéramos estado un mes en el Caribe, el resultado no sería ni el mejor ni el esperado y es fácil que la piel tome un tono anaranjado que no es el adecuado.

Cómo y dónde aplicarlos

Lo primero de todo, no olvides hacerte con una brocha en condiciones. No necesitas una pequeña, ni una mediana de colorete. Es necesario que apostemos por una grande, que pueda abarcar cuanto más mejor, porque los polvos de sol deben aplicarse de forma global con el objetivo de que llegue  a más partes y el cosmético se unifique.

BrochasAplícalo en las zonas que necesitas broncear, pero no de forma concienzuda. Se trata de trazar una línea horizontal, del lado que empecemos al que deseemos terminar, muy ligera. Así, el tono se irá unificando él solo, y no tendremos una zona demasiado maquillada.

Solares polvo

Piensa en qué partes concretas de tu cuerpo te apetece broncear, y pasa un par de veces la brocha por ellas, ¡brillarás!