Hace unos años salió el boom de las cremas con veneno. Al principio, mucha gente era escéptica al uso de este tipo de cremas por miedo a una posible reacción alérgica. Pero, poco a poco, se ha ido aceptando la idea de que los venenos se han ido usando desde hace más de 3.000 años para tratar enfermedades.
Y en cuento a marca especializada en venenos tenemos a Babaria. Actualmente en el mercado tiene dos líneas de cremas con veneno:
VENENO DE SERPIENTE
Contiene Vitamina E y manteca de Karité. Estos ingredienes sirven para hidratar la piel y proteger frente a los rayos solares. Además contiene péptidos que se encuentran en el veneno de la Víbora del Templo, encargados de alisar la piel y de ser un antiarrugas natural por inhibición de las contracciones de los músculos.
A las dos horas de utilizar esta crema tiene su máximo efecto, con una reducción de las arrugas de expresión del 82%. A los dos días el efecto sigue siendo del 67%.
Tiene una textura no grasa, se absorbe muy bien.
VENENO DE ABEJA
Esta considerado como la alternativa natural y orgánica al bótox, relaja las contracciones del músculo facial dejando la piel más lisa.
Es un producto rico en principios activos, Apamina, Melitina y fosfotipasa A2.
El veneno de abeja mejora la circulación de la sangre para que la piel luzca rejuvenecida. Fomenta la producción de colágeno por su acción renovadora y la reparación de las células dañadas gracias a sus propiedades regenerativas. Además, actúa como barrera protectora contra los radicales libres.
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